Los embajadores de la Unión Europea (UE) expresaron su preocupación por la grave crisis política que atraviesa el país, luego de la aprobación congresal de los referendos para validar el proyecto de Constitución del oficialismo. Entretanto, el Gobierno decidió enviar al canciller David Choquehuanca a la sede de la OEA para esgrimir sus argumentos de reforma constitucional. El vicepresidente Álvaro García Linera y el canciller David Choquehuanca se reunieron ayer, en La Paz, con los embajadores destacados en el país, para analizar la crisis política que vive Bolivia.Tras el encuentro, el embajador español en La Paz, Francisco Montalbán, explicó a los periodistas que las delegaciones europeas han "coordinado su criterio" para trasladar al Gobierno "un mensaje de preocupación, que es la que tiene todo el país".
Montalbán expresó, además, la "voluntad de ayuda" y la disposición de los representantes europeos a la "colaboración en lo que ha de ser la negociación, que es la salida lógica" a una situación política conflictiva.Por su parte, el Ministro de Relaciones Exteriores invitó a los embajadores a participar como "observadores", "no solamente en las elecciones y referendos, sino en todo" el proceso para ratificar el nuevo proyecto constitucional que impulsa el Gobierno para "refundar" el país.
CANCILLER VA A LA OEA El canciller David Choquehuanca será recibido hoy por el Consejo Permanente de la OEA, donde dará cuenta de la situación en el país tras la convocatoria de dos referendos para validar la nueva Constitución.
El secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, y el presidente del Consejo Permanente, Cornelius A. Smith, de Bahamas, recibirán a Choquehuanca.La delegación compuesta además de Choquehuanca por el viceministro de Coordinación Gubernamental, Héctor Arce, se reunirá también con representantes del Departamento de Estado de Estados Unidos, según fuentes de la Embajada boliviana en Washington.
Por la tarde, Choquehuanca asistirá a una conferencia del Diálogo Interamericano, donde ofrecerá un discurso sobre los dos referendos convocados para el 4 de mayo.También asistirá a la conferencia el embajador de Bolivia para Asuntos Comerciales, Pablo Solón, según el Diálogo Interamericano.
El miércoles, la delegación gubernamental boliviana viajará a Nueva York, donde mantendrá una reunión con responsables de la ONU.Ayer mismo, el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti declaró desde Ginebra (Suiza), mediante una teleconferencia, que la Comunidad Internacional mantiene una "amplia solidaridad con el proceso de cambios estructurales" que vive el país.
Llorenti participó de la VII Sesión del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) donde tuvo la oportunidad de hablar acerca de la nueva Constitución Política del Estado, y de denunciar los llamados al desacato de las leyes que hicieron algunas autoridades departamentales.
LOS HECHOS El país vive una profunda crisis política debido a que la oposición acusa al oficialismo de haber dado un "golpe de Estado" tras promulgar tres leyes sobre los referendos para ratificar la nueva Constitución y frenar los procesos autonomistas.
Estas leyes se aprobaron la pasada semana en una polémica sesión del Congreso Nacional, cercado varios días por movimientos sociales afines a Morales que impidieron entrar a ese recinto a parte de la oposición. Pese a que hubo agresiones físicas y verbales contra tres diputadas, el Gobierno salió a justificar el uso de la violencia y la "presión social" de sus sectores afines.
Al día siguiente, los dirigentes opositores se reunieron con varios embajadores destacados en La Paz para pedir a sus Gobiernos la "revisión" de sus relaciones con Bolivia.
Los embajadores explicaron ayer al Gobierno que su reunión con miembros de la oposición respondió "a la lógica" de mantener encuentros con todos los actores políticos del país y aclararon que en ningún momento se pidió la ruptura de relaciones con Bolivia, según dijeron fuentes diplomáticas.Por su parte, el canciller declaró a los periodistas que el Gobierno ha relatado a los diplomáticos de forma "amplia" el proceso constituyente que vive Bolivia y aseguró que "los embajadores han quedado satisfechos con la explicación".