La sesión inició temprano, en una tensa jornada, como presagio de lo que ocurriría al caer la tarde
Fuente: CORREO DEL SUR y Grupo Líder
El texto fue refrendado por 136 de 139 asambleístas
ABI
"Nos indican que hay un finado, que en paz descanse", dijo Silvia Lazarte antes de seguir con la aprobación del texto en grande de la Constitución Política del Estado del Movimiento Al Socialismo (MAS).La sesión inició temprano, en una tensa jornada, como presagio de lo que ocurriría.Desde un inicio y ante los enfrentamientos que habían comenzado una jornada antes, la propuesta del retorno de poderes a Sucre frenó el desarrollo normal de la plenaria en la que estaba prevista la aprobación de los 21 informes de comisiones y, si el tiempo daba, la aprobación en grande de la Constitución.El MAS se dio cuenta que no podía avanzar en la aprobación de los informes porque en éstos permanecía viva la propuesta de la Capitalidad. Así y con la intención de darle una solución al problema, la representación de Chuquisaca que acudió al lugar -masistas y un emebelista- pidió un cuarto intermedio.Varias reuniones entre paceños y chuquisaqueños marcaban la jornada y la sesión no podía avanzar con regularidad. Los asambleístas de Chuquisaca pedían la aprobación de la tercera propuesta del Consejo Suprapartidario, mientras los representantes del Movimiento al Socialismo (MAS), sobre todo de la bancada de La Paz, hacían una férrea oposición.En medio de esto, se desarrolló una reunión de las organizaciones sociales de Chuquisaca y La Paz, a la cabeza de los chuquisaqueños Damián Condori y Florentino Barrientos y, del lado de los paceños, Edgar Patana y Nazario Ramírez, entre otros. Este encuentro duró más de lo previsto sin arrojar ninguna solución.Con el fin de no perder más tiempo, la directiva apoyada por la plenaria decidió avanzar en la aprobación de informes del resto de las comisiones, excepto en las cinco que contenían la propuesta de Capitalidad: Otros Órganos, Autonomía, Poder Legislativo, Poder Ejecutivo e Hidrocarburos.Así, uno a uno y por unanimidad, se fueron aprobando los informes de comisiones en la plenaria: Visión País; Derechos, Deberes y Garantías; Nacionalidades; Educación; Estructura del Nuevo Estado; Desarrollo Social e Integral; Minería y Metalurgia; Recursos Hídricos; Desarrollo Rural; Tierra y Territorio; Desarrollo Amazónico; Coca y Economía.No fue el caso de Visión de País, que generó una discusión acalorada durante su desarrollo. Otro caso particular fue la comisión Defensa que asumió una decisión salomónica: no leer su informe y más bien ratificar la propuesta del Movimiento Al Socialismo, que había planteado respetar los artículos del sector Defensa escritos en la actual Constitución.Así, logró evitar una posible confrontación entre militares y policías, pero también afianzar la seguridad de la plenaria instalada en el Liceo Militar. La decisión fue aplaudida por la sala después de que todos votaran por ratificar los artículos de la actual Constitución Política del Estado.De ahí en adelante, el debate de Capitalidad nuevamente propició un nuevo cuarto intermedio en la sala y esta vez las conversaciones se desarrollaron entre asambleístas. El retorno a la plenaria fue difícil porque no hubo quórum, sobre todo por la intransigencia del Movimiento Sin Miedo, según denunciaron los propios masistas.Al final, la representación de Chuquisaca decidió jugarse la última carta y llevó una resolución a la plenaria para que ésta decidiera la suerte de la tercera propuesta del Consejo Suprapartidario. Entre sollozos, María Oporto, jefe de la bancada del Movimiento Al Socialismo de Chuquisaca, leyó la resolución y pidió, para destrabar la Asamblea y en respeto a la demanda de todo el pueblo chuquisaqueño, su aprobación. Así, no sólo se viabilizaría la Asamblea, sino se daría curso al planteamiento del Departamento -sostuvo-, por el cual los asambleístas presentes habían tenido dificultades en su región.Mientras empezaba el debate por la férrea oposición del MSM, el prefecto del Departamento, David Sánchez, y una representación de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, a la cabeza de Cristian Sanabria, irrumpieron en la sala gritando que parara la plenaria. Ya había caído la primera víctima mortal.La decisión de la directiva fue decretar inmediatamente un cuarto intermedio ante la indecisión de la sala por aprobar la resolución, pero además empujada por la noticia que, lejos de causar preocupación, hasta fue aplaudida por un par de constituyentes del MAS.Con una reunión previa de la directiva y consultas por teléfono del ministro Alfredo Rada, se reinstaló la plenaria y los asambleístas empezaron a aprobar con prisa el resto de los informes. Fue la presidenta de la Asamblea, Silvia Lazarte, la que confirmó escuetamente a la sala que había un muerto. "Que en paz descanse", añadió para inmediatamente seguir con la sesión.Primero, la resolución sobre la Capitalidad se aprobó con 118 votos a favor y 18 abstenciones de los representantes paceños.Luego, el constituyente del MAS, Eduardo García, leyó el índice de lo que podría ser la nueva Constitución Política del Estado y, apurada por los gases que ya se sentían en el Paraninfo del Liceo Militar y los estruendos cada vez más fuertes de dinamitas, la directiva sometió inmediatamente a voto la decisión y prácticamente todos los asambleístas respaldaron la aprobación en grande de la nueva Constitución.En la mañana, cuando se reportó la primera lista, se contaron 142 asambleístas, aunque después llegaron varios retrasados. Sin embargo, la agencia estatal de noticias informó que el texto había sido refrendado por 136 de 139 asambleístas presentes, con tres abstenciones, una de ellas del constituyente Emilio Gutiérrez según constató este diario.La sala estalló en júbilo e inmediatamente los asambleístas oficialistas empezaron a cantar el Himno Nacional con el puño erguido y la mano derecha en el corazón, mientras el pánico cundía en el Liceo por los gases, los estruendos y las noticias que se escuchaban a través de radioemisoras. Ya antes de la aprobación, la puerta del Paraninfo se había militarizado, quedando en sala sólo los asambleístas del MAS.En un determinado momento, la Policía, asustada, pidió municiones a los militares e incluso solicitó su intervención, pero éstos se negaron al no haber una orden superior.Ante el clima social, los alteños habían partido hacia La Paz.
ABI
"Nos indican que hay un finado, que en paz descanse", dijo Silvia Lazarte antes de seguir con la aprobación del texto en grande de la Constitución Política del Estado del Movimiento Al Socialismo (MAS).La sesión inició temprano, en una tensa jornada, como presagio de lo que ocurriría.Desde un inicio y ante los enfrentamientos que habían comenzado una jornada antes, la propuesta del retorno de poderes a Sucre frenó el desarrollo normal de la plenaria en la que estaba prevista la aprobación de los 21 informes de comisiones y, si el tiempo daba, la aprobación en grande de la Constitución.El MAS se dio cuenta que no podía avanzar en la aprobación de los informes porque en éstos permanecía viva la propuesta de la Capitalidad. Así y con la intención de darle una solución al problema, la representación de Chuquisaca que acudió al lugar -masistas y un emebelista- pidió un cuarto intermedio.Varias reuniones entre paceños y chuquisaqueños marcaban la jornada y la sesión no podía avanzar con regularidad. Los asambleístas de Chuquisaca pedían la aprobación de la tercera propuesta del Consejo Suprapartidario, mientras los representantes del Movimiento al Socialismo (MAS), sobre todo de la bancada de La Paz, hacían una férrea oposición.En medio de esto, se desarrolló una reunión de las organizaciones sociales de Chuquisaca y La Paz, a la cabeza de los chuquisaqueños Damián Condori y Florentino Barrientos y, del lado de los paceños, Edgar Patana y Nazario Ramírez, entre otros. Este encuentro duró más de lo previsto sin arrojar ninguna solución.Con el fin de no perder más tiempo, la directiva apoyada por la plenaria decidió avanzar en la aprobación de informes del resto de las comisiones, excepto en las cinco que contenían la propuesta de Capitalidad: Otros Órganos, Autonomía, Poder Legislativo, Poder Ejecutivo e Hidrocarburos.Así, uno a uno y por unanimidad, se fueron aprobando los informes de comisiones en la plenaria: Visión País; Derechos, Deberes y Garantías; Nacionalidades; Educación; Estructura del Nuevo Estado; Desarrollo Social e Integral; Minería y Metalurgia; Recursos Hídricos; Desarrollo Rural; Tierra y Territorio; Desarrollo Amazónico; Coca y Economía.No fue el caso de Visión de País, que generó una discusión acalorada durante su desarrollo. Otro caso particular fue la comisión Defensa que asumió una decisión salomónica: no leer su informe y más bien ratificar la propuesta del Movimiento Al Socialismo, que había planteado respetar los artículos del sector Defensa escritos en la actual Constitución.Así, logró evitar una posible confrontación entre militares y policías, pero también afianzar la seguridad de la plenaria instalada en el Liceo Militar. La decisión fue aplaudida por la sala después de que todos votaran por ratificar los artículos de la actual Constitución Política del Estado.De ahí en adelante, el debate de Capitalidad nuevamente propició un nuevo cuarto intermedio en la sala y esta vez las conversaciones se desarrollaron entre asambleístas. El retorno a la plenaria fue difícil porque no hubo quórum, sobre todo por la intransigencia del Movimiento Sin Miedo, según denunciaron los propios masistas.Al final, la representación de Chuquisaca decidió jugarse la última carta y llevó una resolución a la plenaria para que ésta decidiera la suerte de la tercera propuesta del Consejo Suprapartidario. Entre sollozos, María Oporto, jefe de la bancada del Movimiento Al Socialismo de Chuquisaca, leyó la resolución y pidió, para destrabar la Asamblea y en respeto a la demanda de todo el pueblo chuquisaqueño, su aprobación. Así, no sólo se viabilizaría la Asamblea, sino se daría curso al planteamiento del Departamento -sostuvo-, por el cual los asambleístas presentes habían tenido dificultades en su región.Mientras empezaba el debate por la férrea oposición del MSM, el prefecto del Departamento, David Sánchez, y una representación de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, a la cabeza de Cristian Sanabria, irrumpieron en la sala gritando que parara la plenaria. Ya había caído la primera víctima mortal.La decisión de la directiva fue decretar inmediatamente un cuarto intermedio ante la indecisión de la sala por aprobar la resolución, pero además empujada por la noticia que, lejos de causar preocupación, hasta fue aplaudida por un par de constituyentes del MAS.Con una reunión previa de la directiva y consultas por teléfono del ministro Alfredo Rada, se reinstaló la plenaria y los asambleístas empezaron a aprobar con prisa el resto de los informes. Fue la presidenta de la Asamblea, Silvia Lazarte, la que confirmó escuetamente a la sala que había un muerto. "Que en paz descanse", añadió para inmediatamente seguir con la sesión.Primero, la resolución sobre la Capitalidad se aprobó con 118 votos a favor y 18 abstenciones de los representantes paceños.Luego, el constituyente del MAS, Eduardo García, leyó el índice de lo que podría ser la nueva Constitución Política del Estado y, apurada por los gases que ya se sentían en el Paraninfo del Liceo Militar y los estruendos cada vez más fuertes de dinamitas, la directiva sometió inmediatamente a voto la decisión y prácticamente todos los asambleístas respaldaron la aprobación en grande de la nueva Constitución.En la mañana, cuando se reportó la primera lista, se contaron 142 asambleístas, aunque después llegaron varios retrasados. Sin embargo, la agencia estatal de noticias informó que el texto había sido refrendado por 136 de 139 asambleístas presentes, con tres abstenciones, una de ellas del constituyente Emilio Gutiérrez según constató este diario.La sala estalló en júbilo e inmediatamente los asambleístas oficialistas empezaron a cantar el Himno Nacional con el puño erguido y la mano derecha en el corazón, mientras el pánico cundía en el Liceo por los gases, los estruendos y las noticias que se escuchaban a través de radioemisoras. Ya antes de la aprobación, la puerta del Paraninfo se había militarizado, quedando en sala sólo los asambleístas del MAS.En un determinado momento, la Policía, asustada, pidió municiones a los militares e incluso solicitó su intervención, pero éstos se negaron al no haber una orden superior.Ante el clima social, los alteños habían partido hacia La Paz.
LA PALABRA DE LOS ASAMBLEÍSTAS Después de cerrada la sesión, el primero en salir a los medios fue Carlos Romero (MAS) para afirmar que la decisión tomada en la Asamblea había sido para pacificar el país, demostrando que sí se podía avanzar en los cambios en democracia.También la presidenta de la Asamblea, Silvia Lazarte, habló. Anunció que el trabajo de la Asamblea en la aprobación en detalle y en revisión continuaría, aunque sin fecha ni lugar fijos.La asambleísta Marcela Revollo fue la que se refirió a la propuesta aprobada sobre la Capitalidad al afirmar que aún podía ser vetada en la aprobación en detalle, mientras los chuquisaqueños negaron ser traidores a su región porque habían peleado para la aprobación de ese planteamiento.Ello generó críticas en el oficialismo. Magda Calvimontes (MAS) aseguró que Juan del Granado y Luis Revilla tenían igual cantidad de culpa que el Comité Interinstitucional y el Gobierno por la muerte de una persona. Aseguró que todo se hubiera podido evitar si los paceños cedían un poco y dejaban que Sucre sea declarada Capital.Por la noche, se advirtió varios heridos y un estudiante fue atendido en Sanidad del Liceo Militar; el médico decía que estaba muy mal y, por la noche, recién fue evacuado.
ACUSACIONES DEL GOBIERNO Después del cuarto intermedio en la plenaria, el ministro Alfredo Rada se reunió con el jefe policial a cargo de toda la movilización en Sucre para hacer consultas a La Paz.Por la mañana, Rada estuvo en permanente consulta con los jefes policiales y responsabilizó de lo que podría ocurrir al Comité Interinstitucional y a la FUL, denunciando que el rector Jaime Barrón se había negado a reunirse con él porque el prefecto David Sánchez estaría presente. De la misma forma, aseguró que la Policía sólo usaría armas antimotines.Sin embargo, el rector había llegado a las 11:00 al Liceo Militar exigiendo la suspensión de la plenaria por falta de garantías.Dijo que el ministro Rada en vez de otorgarles seguridad les pidió abandonar el lugar para ser convocados una vez llegara el Prefecto."Pero el Prefecto tardó y nosotros para no estar cerca de los campesinos de El Alto que llegaron a querer abusar de Chuquisaca, esperamos una hora para que el ministro nos convoque y al no haber nada, cuando estábamos retornando por las rieles, recibimos la llamada del Prefecto que nos estaba esperando, pero le comunicamos que no podíamos volver porque nadie nos estaba resguardando", afirmó.Después de ese intento con la mediación del Arzobispo de Sucre, monseñor Jesús Pérez Rodríguez, a eso de las 18:00, volvieron a retomar la iniciativa del diálogo y convinieron en reunirse en la localidad de Totacoa, pero el Gobierno decidió que la reunión sea en La Glorieta; al llegar al Liceo vieron que el prefecto David Sánchez ya estaba de retorno porque no había ninguna garantía personal.El mismo Prefecto había sido echado por los constituyentes y, por eso, tuvieron que retornar cuando se enteraron de la muerte de una persona.Temprano, el Comité había denunciado la represión ante las embajadas y organismos internacionales.
VOCES DE LOS ACTORES
Juan Ramón Quintana Celebramos la aprobación del texto en grande. Ahora se tiene que buscar la forma de seguir. Vamos a hacer todo el esfuerzo para garantizar la seguridad física de los constituyentes y para garantízale trabajo y el desarrollo de la Asamblea Constituyente como le corresponde al Gobierno nacional.
Tuto Quiroga No puede un presidente constitucional redactar una Constitución acuartelada, escrita con fusiles y bayonetas y manchada con sangre sucrense. Es una escena vergonzante que está dando vuelta al mundo y la última vez que se han tomado decisiones políticas y se ha tomado decisiones en cuarteles y sido la malhadada época de García Meza y Arce Gómez.
Silvia Lazarte Nos indican que hay un finado, que en paz descanse, lo sentimos mucho, no sé si serán tal vez dos. La información exacta no tenemos, de todas maneras, hermanos y hermanas, el tema de la consideración que han podido presentar eso ponemos en consideración (la resolución para aprobar la tercera propuesta de capitalidad) (sic).
Jaime Barrón A nuestros universitarios y estudiantes pedimos calma y tranquilidad. Pido a este Gobierno, a don Evo y al Vicepresidente que consideren que Chuquisaca es parte de Bolivia y no merece ser masacrada. Lo que se están haciendo acá no tiene nombre. No puede ser que un Gobierno democrático no sepa comprender el clamor del pueblo. La responsabilidad es de Evo Morales, García Linera y los ministros. En Chuquisaca ha habido abuso de poder.
Y pese a todo ello y bajo los comflictos que al momento continuan con los muertos y heridos, Sucre resiste y no se rinde en su lucha por la capitalía y el respto a la democracia.
